Las zonas de comodidad o esferas de nuestras vidas, usualmente son definidas como mentiras o temores que creemos de nosotros mismos, de otros o de Dios. Las emociones de culpa y vergüenza pueden forzarnos a crear una zona de comodidad (de donde tememos salir). Sin embargo, usualmente lo que controla nuestras emociones es el TEMOR. Lo que debe quedar claro es que estas emociones negativas no están determinadas por nuestra fe.
El temor ocurre cuando se enfoca en lo desconocido o en cosas que están fuera de su control.
¿Cómo vencer el miedo?
Paso 1. Reconoce e identifica el miedo
Es más fácil erradicar algo de tu vida cuando identificas que está allí. Si no identificas ni reconoces el miedo, va a ser difícil deshacerte de él. La palabra dice: “y conoceréis la verdad y la verdad os hará libres” (Juan 8:32). Esta verdad develada sacará a la luz lo oculto en lo más profundo de nuestro corazón.
Si se nos hace difícil identificar nuestros miedos por nosotros mismos, debemos buscar ayuda de un pastor, o consejero espiritual, y aún ayuda profesional (psicólogos, preferiblemente cristianos), para obtener una buena orientación. Generalmente, detrás del temor yace una mentira que identificar. **Permite que el Señor haga surgir a la superficie todos los temores dominantes en tu vida, y todas las mentiras enraizadas.
¿A qué tememos?: A la muerte, a no amar o ser amado, a Satanás, a la muerte de un ser querido, al enfrentamiento, a pasar vergüenza, al fracaso, a ser rechazado, al matrimonio, al divorcio, a la falta de identidad sexual (homosexualidad), a enloquecer, a problemas económicos, al dolor o las enfermedades, a nunca casarte, al futuro, a perder la salvación, a que Dios no nos ame, a haber cometido pecado imperdonable.
Paso 2. Logra convertir tu miedo en tu aliado, y verás un sentimiento normal y necesario para vivir
¿A qué tememos?: A la muerte, a no amar o ser amado, a Satanás, a la muerte de un ser querido, al enfrentamiento, a pasar vergüenza, al fracaso, a ser rechazado, al matrimonio, al divorcio, a la falta de identidad sexual (homosexualidad), a enloquecer, a problemas económicos, al dolor o las enfermedades, a nunca casarte, al futuro, a perder la salvación, a que Dios no nos ame, a haber cometido pecado imperdonable.
El temor es una respuesta natural que Dios ha puesto en nosotros cuando está amenazada nuestra seguridad física o psicológica. Sin embargo, los temores irracionales (por ej. Fobias) nos impiden ser un buen testimonio. El temor de Dios es el principio de la sabiduría, es el único temor que debe dominar a todos los temores.
¿Cómo convertir el miedo en tu aliado?
- Acepta el miedo que nos protege, como un sentimiento normal y necesario para vivir.
- Analiza el temor que sientes, el que te paraliza, no dejándote ser feliz y no quiere que vivas tu vida en paz y a plenitud, este es tu enemigo. Debes estar decidido y proponerte a vencerlo.
- Cuando sientas tu miedo específico. Recuerda que mas poderoso es el que está en ti que el que está en el mundo (Juan 4:4), **el miedo no debe controlar tu vida.
- Si piensas que es imposible luchar contra tu miedo, estás permitiendo que el enemigo siembre falsas mentiras en tu mente, recuerda que el padre de mentiras (Juan 8:44). Recuerda la palabra de corintios que dice que lleves todo pensamiento cautivo en obediencia a Cristo (2 Corintios 10:5).
Paso 3. Tu identidad en Cristo debe estar al máximo para crear confianza y seguridad
Cuando sabemos quienes somos en Cristo, estaremos convencidos de que NADA podrá separarnos del amor de Dios (Romanos 8:38), estaremos seguros de que todas sus promesas son realidad en nuestra vida. Cuando no tenemos identidad en Cristo, nuestra personalidad se ve afectada, nuestra autoestima es una de las más dañadas, estamos llenos de miedo, angustia, preocupaciones, sentimientos de culpa y rechazo y frustración (ira a bajo nivel). Cualquier cosa nos parece imposible de obtener, porque no tenemos la confianza puesta en aquel que todo lo puede, sin embargo la palabra dice que TODO LO PODEMOS EN CRISTO QUE NOS FORTALECE (Filipenses 4:13).
Debemos recordar siempre lo que Dios dice de nosotros, que somos la niña de sus ojos (Salmo 17:8), somos linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios (1 Pedro2:9), somos sal de la tierra y luz del mundo (Mateo 5:13-14). Es importante que declaremos eso “todo el tiempo”.
Paso 4. Cuida lo que piensas todo el tiempo y vencerás tus miedos
Todo pensamiento negativo tiene su origen en el sistema de creencias, que es el conjunto de pensamientos, emociones, sentimientos, etc., que se han asentado en nuestro subconsciente desde nuestra infancia, es difícil cambiar estos patrones de pensamiento, sobre todo, si no se adquiere la herramienta de la palabra de Dios.
La palabra dice que en todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre, si hay virtud alguna, si alguna alabanza, en eso pensad. (Filipenses 4:8).Nosotros mismos alimentamos los miedos. El enemigo se aprovecha de nuestra mente cuando no estamos alineados a la palabra de Dios.
Cuando un pensamiento de temor quiera apoderarse de ti, debemos aprender a sustituir todo pensamiento negativo (como el miedo) por la palabra de Dios. Cuando el miedo llegue a su vida, recuerda la palabra que dice que: No nos ha dado Dios un espíritu de temor, sino de poder, amor y dominio propio (2 Timoteo 1:7), y que el perfecto amor echa fuera todo temor (Juan 4:18).
Paso 5. Domina tu lengua
La muerte y la vida están en poder de la lengua (Proverbios 18:21), y todo lo que atemos en la tierra será atado en el cielo y todo lo que desatemos en la tierra será desatado en el cielo (Mateo 18:18).
En la biblia dice: tal como piensa el hombre, en su corazón así es el (Proverbios 23:7), y que de la abundancia del corazón, habla la boca (Mateo 12:34). Debemos tener mucho cuidado con lo que entra a nuestra mente y corazón. Como pensamos así actuamos, si pensamos negativo vamos a atraer cosas negativas a nuestra vida. Cuando hablamos palabras destructivas para nosotros o a los demás, nuestra vida poco a poco se tornara destructiva. “Si es este el modelo que usas para hablar y pensar, ese va hacer el modelo de tu vida (de destrucción)”.
Mientras confesemos el miedo, él nunca nos dejará. Dios hace la obra en nosotros, pero debemos creer en ello, y no negar lo que ya hizo con nuestra declaración. Aun cuando lo sintamos, debemos declarar victoria sobre el temor, diciendo las cosas que no son como si fueran siempre como lo hace el Señor (Romanos 4:17).
Paso 6. Aprende a descansar en Dios
Es fácil aconsejar a otros que deje las preocupaciones, lo difícil es que el aconsejado las deje o las olvide así nada mas, a nosotros mismos nos cuesta, generalmente, la persona que busca consejo suele ser un adicto a preocuparse, y por eso se originan en él una gran cantidad de temores. La preocupación es incluso miedo a lo que aún no ha pasado. Pero tenemos que estar claros que “NO tenemos control de NADA”, solo Dios tiene el control. El es Dios no hay otro dice la palabra (Isaías 44:6, Isaías 43:11, 1 Timoteo 2:5).
Cuando el Señor dice en su palabra: Venid a mi todos los que estáis trabajados y cargados y yo os haré descansar (Mateo 11:28), y que en lugares de delicados pastor nos hará descansar y que en aguas de reposo nos pastoreara. ¿Qué nos impide creer esta verdad y aceptar esa maravillosa invitación?.
Querido Padre celestial, confieso que he permitido que el temor me domine y que la falta de fe es pecado. Gracias por tu perdón. Reconozco que no me has dado espíritu de temor, sino de poder, amor y dominio propio. Renuncio a todo espíritu de temor que opera en mi vida y te pido que saques a la luz todos los temores dominantes en mi vida y las mentiras que yacen detrás de ellos. Deseo vivir por e en ti y en el poder de tu Espíritu Santo. Te lo pido en el nombre de Jesús. Amén.
Recopilado por: Dra. María Giuffrida
Referencia
Lynch, Charle. Conserjería Bíblica.